Carlos III: El Rey Ilustrado de España
Carlos III (1759-1788) representó la cima del despotismo ilustrado español. Tras el fracaso inicial con ministros extranjeros como Esquilache (que provocó motines populares), nombró ministros españoles como Floridablanca y Jovellanos.
Sus reformas transformaron España: aplicó una política regalista sometiendo la Iglesia al poder real, limitó la Inquisición y expulsó a los jesuitas. En economía, decretó el libre comercio con América, cultivó nuevas tierras y creó manufacturas reales.
La educación recibió un impulso enorme con nuevas escuelas y planes de estudio renovados. Las Sociedades Económicas de Amigos del País se convirtieron en centros donde los ilustrados intercambiaban ideas y ayudaban a agricultores y artesanos.
Carlos IV (1788-1808) frenó las reformas cuando estalló la Revolución Francesa por miedo al contagio revolucionario. La crisis económica empeoró y ni siquiera las desamortizaciones de Godoy solucionaron los problemas de la Hacienda Real.
Francisco de Goya retrató esta época de transición, desde los retratos cortesanos hasta las terribles escenas de guerra, convirtiéndose en uno de los pintores más importantes de la historia española.
Curiosidad: Las Sociedades de Amigos del País fueron la versión española de los clubes ilustrados europeos.