La Teoría cinético molecular de la materia explica el comportamiento y las propiedades de la materia a nivel microscópico.
Los postulados de la teoría cinético molecular de los gases establecen que toda la materia está formada por partículas en constante movimiento que interactúan entre sí. Estas partículas tienen espacios vacíos entre ellas y su comportamiento determina el estado físico de la materia. En los gases, las partículas tienen mayor libertad de movimiento y ocupan todo el espacio disponible, lo que explica su alta compresibilidad. Los líquidos tienen sus partículas más cercanas entre sí pero mantienen cierta movilidad, mientras que en los sólidos las partículas están fuertemente unidas con movimientos vibratorios limitados.
La compresibilidad de los gases es una propiedad fundamental que permite que su volumen se reduzca significativamente al aplicar presión, a diferencia de los líquidos y sólidos que son prácticamente incompresibles. Este fenómeno está directamente relacionado con el factor de compresibilidad Z, que mide la desviación del comportamiento de un gas real respecto a un gas ideal. La licuefacción es el proceso mediante el cual un gas se convierte en líquido al modificar las condiciones de presión y temperatura. Este proceso tiene importantes aplicaciones industriales y está relacionado con fenómenos naturales como la licuefacción de suelos durante terremotos. La teoría cinético-molecular también explica otras propiedades como la difusión, la presión y los cambios de estado, siendo fundamental para entender el comportamiento de la materia en diferentes condiciones.