Vanguardias: Ruptura y Experimentación
Las Vanguardias llegan para romper completamente con todo lo anterior. Estos movimientos comparten cuatro características esenciales: ruptura con la tradición, experimentación constante, uso de imágenes audaces y actitud provocadora.
Los primeros movimientos que llegan a España son el cubismo (con imágenes ilógicas) y el futurismo (que exalta las máquinas, el deporte y la modernidad). Ramón Gómez de la Serna populariza las vanguardias con sus ingeniosas greguerías. También surgen movimientos españoles como el ultraísmo y el creacionismo.
El surrealismo marca un punto de inflexión. Nacido del dadaísmo, no busca separar el arte de la realidad, sino liberar al ser humano de todas las limitaciones: morales, estéticas, políticas y racionales. Su técnica más característica es la escritura automática: escribir sin pensar, dejando que fluyan los impulsos inconscientes.
Dato curioso: Los vanguardistas eliminan signos de puntuación y crean caligramas para romper con las formas tradicionales del verso.