El mester de clerecía: Berceo y el Arcipreste de Hita
Los clérigos medievales tenían una forma muy diferente de hacer literatura. Gonzalo de Berceo nos regaló los Milagros de Nuestra Señora, 25 relatos que siguen siempre el mismo patrón: presentación en un lugar idílico, problema, milagro y moraleja. Utilizaba la cuaderna vía: estrofas de 4 versos de 14 sílabas con rima consonante.
El Libro de Buen Amor del Arcipreste de Hita es una obra mucho más compleja y divertida. Juan Ruiz creó una autobiografía ficticia llena de consejos amorosos, crítica social y episodios paródicos. Aunque su objetivo oficial era "advertir contra el loco amor", en realidad es una obra llena de humor y sátira.
Lo más interesante es cómo describe las condiciones que debe tener una mujer para ser bella y las características necesarias de una trotaconventos (una vieja mensajera). Este personaje, que debe ser lisonjera y saber engañar, se convierte en el precedente literario de la famosa Celestina.
Para el examen: Recuerda que el mester de clerecía siempre tiene intención didáctica y usa la cuaderna vía, mientras que el de juglaría busca entretener con métrica irregular.