Reformas que cambiaron España
Los Reyes Católicos no se conformaron con ganar batallas; querían transformar completamente cómo funcionaba el país. Crearon nuevas instituciones como un ejército permanente y un cuerpo de embajadores para las relaciones exteriores.
En Castilla, establecieron la figura del corregidor para vigilar los municipios, mientras que en Aragón instauraron la insaculación (un sistema de sorteo para cargos municipales donde el rey aprobaba a los candidatos). Los Consejos se dividían en territoriales y temáticos, asesorando a los reyes pero sin poder de decisión.
La unificación territorial llegó con la conquista de Granada en 1492 y la anexión de Navarra en 1512. Pero quizás lo más polémico fue la unificación religiosa: el Tribunal de la Inquisición perseguía a falsos conversos, y se produjo la expulsión de judíos en 1492 y musulmanes en 1501.
En política exterior, desarrollaron una estrategia brillante: Castilla se expandió por el Atlántico (terminando la conquista de Canarias) mientras Aragón lo hacía por el Mediterráneo (controlando el norte de África y consolidando Nápoles).
Recuerda: La Concordia de Segovia (1475) estableció cómo Isabel y Fernando compartirían el poder en sus respectivos territorios.