La emergencia climática
La crisis climática ya no es futuro, es presente. España, como zona mediterránea, es especialmente vulnerable al cambio climático. Estamos viendo temperaturas más altas, menos lluvia y fenómenos extremos más frecuentes.
Las principales causas son las emisiones de gases de efecto invernadero por actividades humanas: transporte contaminante, industria, generación de residuos, agricultura intensiva y deforestación. Los gases principales son CO₂, metano y óxido nitroso.
Las consecuencias ya las vivimos: olas de calor más largas e intensas (el verano se ha alargado cinco semanas), lluvias extremas que causan inundaciones, y sequías más severas. Los patrones climáticos tradicionales se están alterando.
Las medidas de mitigación incluyen reducir emisiones, apostar por energías renovables y una transición energética justa. También necesitamos medidas de adaptación para convivir con estos cambios inevitables.
Reflexión importante: La zona mediterránea se está calentando un 20% más rápido que la media global - por eso la emergencia climática nos afecta especialmente.