Las tres sustancias: yo, Dios y el mundo
Del cogito ("pienso, luego soy") Descartes concluye que es una res cogitans (sustancia pensante). Pero ¿existe algo más en el mundo?
Usa la prueba ontológica de San Anselmo: si piensas en el ser más perfecto, debes admitir su existencia, porque si no existiera, no sería perfecto. Tenemos una idea innata de Dios como ser perfecto.
Dios actúa como un "sello de garantía" porque, siendo bueno y veraz, no nos habría dado facultades que funcionaran mal. Si Dios existe y es perfecto, podemos confiar en nuestras capacidades.
Gracias a Dios (res infinita), Descartes puede fundamentar la existencia de la realidad exterior y justificar nuestro conocimiento del mundo físico.
📝 Para recordar: Descartes establece tres sustancias: res cogitans (mente), res extensa (materia) y res infinita (Dios).