Tejidos Epiteliales y Conectivos
Los tejidos epiteliales recubren nuestro cuerpo y segregan sustancias importantes. Sus células están muy juntas con poca sustancia intercelular. Existen dos tipos principales: el epitelio de revestimiento que tapiza la parte externa (como la epidermis) y las cavidades internas, y el epitelio glandular formado por células secretoras que pueden formar glándulas.
Los tejidos conectivos tienen mucha sustancia intercelular, también llamada "matriz extracelular". El tejido conjuntivo está debajo de la piel y entre órganos, con fibras como el colágeno. El tejido adiposo está formado por adipocitos que almacenan grasa, nos proporcionan energía y aislamiento térmico.
El tejido cartilaginoso tiene células llamadas condrocitos con una matriz elástica y firme. Protege las articulaciones, forma parte de la laringe, orejas y nariz. Por otro lado, el tejido óseo es rígido gracias a sales minerales que se depositan en su matriz formando laminillas concéntricas, dando soporte a todo el organismo.
💡 ¿Sabías que las células del tejido óseo (osteocitos) viven en pequeñas cavidades llamadas lagunas que están conectadas entre sí? ¡Esto les permite comunicarse a pesar de estar rodeadas de materia dura!