Propiedades de las Potencias y Problemas de Fracciones
¿Te agobias cuando ves expresiones con muchas potencias? La clave está en descomponer en factores primos cada número antes de simplificar. Por ejemplo, 25 = 5², 8 = 2³, y así sucesivamente.
Para simplificar potencias complejas, primero descompón todos los números en sus factores primos básicos. Después aplica las propiedades de las potencias: cuando multiplicas, sumas los exponentes; cuando divides, los restas. Recuerda que a^m · a^n = a^m+n y a^m ÷ a^n = a^m−n.
Los problemas de herencia y bibliotecas se resuelven planteando ecuaciones con fracciones. Si alguien deja 3/5 a una hija y 1/3 a un hijo, suma estas fracciones para saber qué parte del total representan. Lo que queda corresponde a la cantidad fija que te dan en el problema.
Truco clave: Siempre busca un denominador común cuando sumes fracciones. Para 3/5 + 1/3, el denominador común es 15.