Las 5 Secuencias Textuales Fundamentales
Imagínate que cada texto es como una herramienta diferente: cada uno tiene su función específica y su manera particular de organizarse. Las secuencias textuales son exactamente eso: formas distintas de estructurar la información según lo que queremos conseguir.
La secuencia narrativa es perfecta cuando quieres contar algo que pasó. Piensa en cuando le cuentas a un amigo qué te ocurrió el fin de semana: sigues un orden temporal con planteamiento, complicación y desenlace. Usas mucho el pretérito y verbos de acción.
Por el contrario, la secuencia descriptiva se centra en pintar con palabras cómo es algo o alguien. Es como hacer una foto detallada pero con texto. Aquí predominan el presente, los verbos "ser" y "tener", y marcadores que organizan la información.
¡Ojo! Un mismo texto puede combinar varias secuencias. Una novela narrativa incluye descripciones, y un ensayo argumentativo puede tener partes expositivas.
La secuencia expositiva tiene un objetivo claro: explicarte algo que puede resultar complicado. Es la que encontrarás en tus libros de texto. Se organiza en planteamiento y análisis, usa vocabulario objetivo y tercera persona.
Finalmente, tenemos la secuencia argumentativa, que busca convencerte de algo, y la dialogada, que reproduce conversaciones reales. Cada una tiene su estructura y elementos lingüísticos característicos que las hacen únicas y efectivas.