Personajes y lenguaje
La obra refleja una sociedad dividida entre el mundo de los señores y el de los criados, pero todos se mueven por intereses personales que los llevan a la tragedia.
Celestina es el personaje más complejo y fascinante. Esta alcahueta domina a todos con su habilidad para persuadir y engañar. Le encantan los placeres de la vida: el vino, la comida, el oro... Pero su propia codicia la destruye cuando se niega a compartir las ganancias con los criados.
Calisto representa la parodia del amor cortés - es inmaduro, imprudente y obsesivo. Melibea evoluciona de ser altiva y desdeñosa a entregarse completamente al amor. Los criados (Sempronio y Pármeno) traicionan a su señor por dinero, mientras que las prostitutas Elicia y Areúsa buscan venganza tras las muertes.
El lenguaje cambia según la clase social. Los señores hablan de forma culta con referencias latinizantes y artificios retóricos. Los criados usan un lenguaje coloquial lleno de refranes y expresiones populares. Solo Celestina maneja perfectamente ambos registros, adaptándose a cada situación.
¡Fíjate bien! Celestina es el único personaje capaz de hablar tanto como una señora refinada como una mujer del pueblo, lo que demuestra su inteligencia y astucia.