La gran expansión de los reinos cristianos (siglos XI-XIII)
La disolución del Califato de Córdoba en 1031 creó las condiciones perfectas para que los núcleos cristianos iniciaran su gran expansión hacia el sur. Este período fue decisivo en la configuración territorial de la península.
Reino de Navarra
Bajo Sancho III (1000-1035), Navarra se convirtió en el reino más poderoso de la península, abarcando Castilla, León, Navarra y Aragón. Sin embargo, a su muerte el reino se dividió entre sus hijos, que fundaron sus propias dinastías.
Reino de Castilla y León
Fernando I, hijo de Sancho III, fundó el reino de Castilla en 1035. Posteriormente, conquistó León y unificó ambos territorios. El avance castellano se aceleró con Alfonso VI, quien conquistó Toledo (1085), hecho que provocó la llegada de los almorávides.
Tras un período de separación, Castilla y León se unieron definitivamente bajo Fernando III en 1230. Este monarca lideró la expansión por el valle del Guadalquivir, conquistando Córdoba, Sevilla y Jaén (1246). Su hijo, Alfonso X el Sabio, completó la conquista de la actual Andalucía occidental.
Reino de Portugal
Fundado por Alfonso Henriquez en el siglo XII tras independizarse de Castilla, Portugal centró su expansión en dos direcciones: el suroeste peninsular y, a partir del siglo XIII, el océano Atlántico, iniciando su vocación marítima.
Corona de Aragón
Ramiro I, hijo de Sancho III, fundó el reino de Aragón en 1035. El matrimonio de la reina Petronila con Ramón Berenguer IV, conde de Barcelona, en 1137 unió estos territorios creando la Corona de Aragón.
Durante el siglo XIII, la Corona aragonesa se expandió en dos direcciones:
- Hacia el levante peninsular, conquistando Valencia y parte de Murcia
- Hacia el Mediterráneo, incorporando las Baleares (Reino de Mallorca) y posteriormente Sicilia
Esta expansión mediterránea continuaría en siglos posteriores, configurando a la Corona de Aragón como una potencia marítima con intereses en todo el Mediterráneo occidental.
La batalla de Las Navas de Tolosa (1212), donde una coalición cristiana derrotó a los almohades, marcó un punto de inflexión que permitió la rápida conquista de gran parte del territorio andalusí durante este período.
💡 Estrategia política: El matrimonio entre Petronila de Aragón y Ramón Berenguer IV de Barcelona (1137) es un ejemplo perfecto de cómo las alianzas matrimoniales fueron clave en la configuración territorial de los reinos medievales.