El Directorio y el Ascenso de Napoleón
Después de tanto caos, Francia necesitaba estabilidad. El Directorio (1795-1799) representó una fase más moderada, dominada por la burguesía conservadora. La nueva Constitución de 1795 restableció el sufragio censitario y dividió el poder entre cinco directores y dos cámaras legislativas.
Sin embargo, el Directorio tenía tres problemas enormes: los jacobinos seguían defendiendo la soberanía nacional, los monárquicos querían restaurar la monarquía, y las guerras con las potencias europeas continuaban. Esta inestabilidad hizo que el gobierno dependiera cada vez más del ejército.
Aquí apareció Napoleón Bonaparte, un general joven y brillante que había demostrado su valía en las guerras externas. En noviembre de 1799 dio un golpe de estado y estableció el Consulado, inicialmente con otros dos cónsules para evitar la dictadura.
Napoleón reformó la administración, creó el famoso Código Civil, reorganizó la hacienda y la enseñanza, y firmó un Concordato con la Iglesia. Pero en 1804, sintiéndose lo suficientemente fuerte, se coronó emperador. La revolución había terminado, pero sus ideas ya habían cambiado el mundo para siempre.
🌍 Legado histórico: La Revolución Francesa acabó con el Antiguo Régimen, estableció la soberanía nacional, inició la Edad Contemporánea y creó el sistema capitalista moderno que se extendió por todo el mundo.