El legado que cambió el mundo
La Revolución francesa transformó a las personas de súbditos en ciudadanos con derechos y deberes. Esto puede parecerte normal hoy, pero fue revolucionario en su época.
Se estableció la separación de poderes (legislativo, ejecutivo y judicial) y la necesidad de una Constitución, bases de todas las democracias actuales. Los partits políticos modernos tienen su origen en los clubs revolucionarios franceses.
El Estado moderno nació de esta revolución: administración pública, divisiones territoriales, ayuntamientos, y un sistema fiscal que afectaba a todos por igual. También se separó la Iglesia del Estado y se creó la educación pública.
El liberalisme econòmic eliminó los gremios medievales y estableció la libertad de empresa y comercio. Se unificaron pesos, medidas y se eliminaron aduanas interiores para facilitar el comercio.
Reflexiona: Muchos derechos que das por sentados hoy (educación pública, igualdad ante la ley, libertad de culto) nacieron de esta revolución hace más de 200 años.