Principales flujos migratorios mundiales
Los flujos migratorios son como ríos humanos que conectan diferentes regiones del planeta siguiendo patrones específicos y duraderos, no movimientos esporádicos.
En el pasado, las migraciones transoceánicas dominaron el panorama. Entre los siglos XVI-XVIII, europeos se dirigían principalmente a América Latina. El siglo XIX trajo el barco de vapor, facilitando movimientos masivos hacia América, Australia y Nueva Zelanda con controles más estrictos en los puertos.
Actualmente, las migraciones han cambiado radicalmente. Las desigualdades económicas, conflictos bélicos y el acceso rápido a información sobre otros países han intensificado estos movimientos. Ya no son principalmente europeos emigrando, sino personas de países menos desarrollados dirigiéndose hacia naciones más prósperas.
Europa ha vivido tres grandes oleadas migratorias. La primera (siglo XIX) envió 55 millones de europeos principalmente a América, impulsada por la revolución industrial. La segunda (1920-1950) fue forzosa debido a las guerras mundiales, afectando especialmente a alemanes, polacos y griegos. La tercera ocurrió durante la Segunda Guerra Mundial con 50 millones de desplazados.
Una característica moderna importante es que los migrantes mantienen conexiones transnacionales constantes con sus países de origen gracias a las comunicaciones actuales.
💡 Dato importante: Las migraciones actuales son menos controladas y más irregulares que en el pasado, lo que genera nuevos desafíos políticos y sociales.