El Pacto de Varsovia: la respuesta soviética
El Pacto de Varsovia fue la respuesta de la Unión Soviética a la creación de la OTAN. Lo firmaron ocho países del bloque socialista: URSS, Polonia, Checoslovaquia, Hungría, Bulgaria, Rumanía, Albania y la República Democrática Alemana.
Esta alianza militar no era solo para defenderse, sino también una herramienta de control soviético. Cuando Hungría (1956) y Checoslovaquia (1968) intentaron rebelarse contra el comunismo, las tropas del Pacto aplastaron brutalmente estos levantamientos.
Nikita Kruschev fue quien impulsó la creación de esta alianza para contrarrestar las presiones occidentales. China participaba como observador, pero no era miembro oficial.
Importante: El Pacto de Varsovia demostró ser más una herramienta de represión interna que de defensa externa.