¿Qué es el Enlace Químico?
Imagínate que los átomos son como personas que no les gusta estar solas y siempre buscan compañía para sentirse más estables. Eso es exactamente lo que pasa en la naturaleza: los átomos se unen para formar enlaces químicos y conseguir mayor estabilidad.
Cuando se juntan átomos del mismo elemento, obtienes sustancias como el hierro puro (Fe). Pero cuando se combinan átomos diferentes, nacen los compuestos como el agua (H₂O).
La regla del octeto explica por qué esto ocurre. Los gases nobles como el helio o el neón son súper estables porque tienen 8 electrones en su capa exterior, y todos los demás átomos "quieren" conseguir esa misma configuración.
Existen tres tipos principales de enlaces: iónicos (entre metales y no metales), covalentes (entre no metales) y metálicos (entre metales). El enlace iónico se forma cuando el metal regala electrones al no metal, creando iones con cargas opuestas que se atraen, como en la sal común (NaCl).
¿Sabías que...? Las sustancias iónicas como la sal son duras pero frágiles, tienen puntos de fusión altos y solo conducen electricidad cuando están disueltas o fundidas.