Sócrates: el contraataque de la razón
Sócrates apareció como el anti-sofista por excelencia. Mientras los sofistas relativizaban todo, él buscaba verdades absolutas.
Su gran doctrina fue el intelectualismo moral: solo se puede ser bueno si se conoce qué es el bien. Nadie hace el mal a propósito, solo por ignorancia. Suena raro, ¿verdad? Pero piénsalo: cuando haces algo malo, ¿no sueles justificarte diciéndote que "en el fondo" estaba bien?
Para Sócrates, virtud = conocimiento. Si realmente supieras qué es lo justo, siempre actuarías justamente. El problema es que creemos saber, pero en realidad somos unos ignorantes.
De ahí su famoso "Solo sé que no sé nada". No es falsa modestia, es el punto de partida de toda filosofía seria: reconocer nuestra ignorancia.
Su método, la mayéutica, era como hacer de comadrona de ideas: ayudar a los demás a "dar a luz" las verdades que ya tenían dentro, pero no sabían que las tenían.
Lección vital Sócrates nos enseña que la sabiduría empieza por reconocer lo poco que sabemos realmente.