El Mundo de las Ideas de Platón
Imagínate que todo lo que tocas y ves es solo una copia imperfecta de algo mucho más real y perfecto. Eso es exactamente lo que pensaba Platón con su sistema dualista. Para él, existe el mundo sensible (lo que percibimos con los sentidos) y el mundo de las Ideas (la realidad auténtica).
Platón desarrolló esta teoría por dos razones clave. Primero, quería encontrar un fundamento sólido para la ética: para ser realmente virtuosos, necesitamos conocer la esencia verdadera de las virtudes. Segundo, buscaba explicar cómo es posible el conocimiento verdadero, ya que nuestro mundo material está en constante cambio.
Las Ideas platónicas son las esencias perfectas de todo lo que existe. Son únicas, eternas e inmutables, y están organizadas jerárquicamente. La Idea de Bien ocupa la cima, junto con las de Justicia, Belleza y Verdad.
Dato clave: Solo la inteligencia puede captar las Ideas, no los sentidos. Por eso el conocimiento verdadero solo es posible a través de la razón.
Según Platón, el ser humano es fundamentalmente su alma inmortal, que pertenece naturalmente al mundo de las Ideas. El cuerpo es solo una "cárcel" temporal. El alma tiene tres partes: racional (prudencia), irascible (fortaleza) y concupiscible (templanza). El objetivo de la vida es la catarsis o purificación para volver al mundo de las Ideas.
El conocimiento funciona como reminiscencia: ya tienes toda la verdad dentro de ti, solo necesitas recordarla. Esto se logra mediante la dialéctica, un método de conversación e inducción que Sócrates usaba magistralmente.