Argumentos Subjetivos y de Consenso Social
¿Alguna vez has usado tu experiencia personal para convencer a alguien? Los argumentos de experiencia personal son exactamente eso: cuando el autor utiliza vivencias propias para defender su postura. Aunque son fáciles de identificar, tienen poco peso porque son subjetivos.
Imagínate escribiendo sobre el cambio climático. En lugar de decir "yo veraneo en Cullera y ya no hay playa", sería más efectivo escribir "los valencianos recordamos que las playas eran enormes y ahora, debido al aumento de la gota fría, apenas se puede poner unas toallas". ¿Ves la diferencia? Uno suena personal y limitado, el otro conecta con una experiencia más amplia.
Los argumentos racionales o del sentir general se basan en valores que acepta la mayoría de la sociedad. Por ejemplo, "A los animales de los circos se les doma con métodos violentos" apela al sentido común sobre el maltrato animal.
¡Ojo! Los argumentos de experiencia personal deben evitar el exceso de "yo, me, mi" para no sonar demasiado subjetivos.