La Literatura del Renacimiento representa uno de los períodos más significativos en la historia de las letras españolas, desarrollándose principalmente durante el siglo XVI. Esta época se caracterizó por un renovado interés en la cultura clásica grecorromana y un enfoque humanista centrado en el individuo.
La literatura renacentista española se distinguió por sus características fundamentales: el uso del castellano como lengua literaria, la influencia de modelos italianos, el equilibrio y la armonía en las formas, y la expresión de temas universales como el amor, la naturaleza y la mitología clásica. Entre los Autores literarios del Renacimiento español más destacados encontramos a Garcilaso de la Vega, considerado el máximo exponente de la lírica renacentista española. Sus obras, especialmente sus sonetos y églogas, revolucionaron la poesía castellana al introducir el verso endecasílabo y las formas métricas italianas. La época de Garcilaso de la Vega estuvo marcada por su vida como soldado y cortesano, lo que influyó en su producción poética, caracterizada por la perfección formal y la expresión de sentimientos amorosos.
Las características de la literatura renacentista incluyen el predominio del idealismo, la búsqueda de la belleza perfecta, y la imitación de los clásicos grecolatinos. La poesía renacentista se distinguió por su refinamiento estilístico, el uso de metáforas elaboradas y la creación de un lenguaje poético sofisticado. Los poetas más importantes del Renacimiento desarrollaron temas como el amor platónico, la naturaleza idealizada y la mitología clásica, estableciendo las bases para el desarrollo posterior de la literatura española. El estilo de Garcilaso de la Vega se caracterizó por su elegancia, claridad y equilibrio, convirtiéndose en modelo para generaciones posteriores de poetas españoles.