La gramática española tiene elementos fundamentales que ayudan a construir oraciones con sentido completo. La estructura y función del sintagma nominal es uno de los componentes más importantes, ya que forma la base de cómo expresamos ideas sobre personas, lugares y cosas. Este sintagma siempre tiene un núcleo (sustantivo) que puede ir acompañado de determinantes y complementos que lo modifican y especifican su significado.
El orden lineal sujeto verbo complemento representa la estructura básica de las oraciones en español. Este orden permite que las ideas fluyan de manera natural y sean fáciles de comprender. El sujeto realiza la acción, el verbo expresa qué acción se realiza, y los complementos aportan información adicional sobre las circunstancias en que ocurre la acción. Por ejemplo, en la oración "María estudia matemáticas en la biblioteca", "María" es el sujeto, "estudia" es el verbo, y "matemáticas en la biblioteca" son los complementos.
La clasificación de nombres en español nos ayuda a organizar y entender mejor las palabras que usamos para nombrar elementos de nuestro mundo. Los nombres o sustantivos pueden ser propios (María, España) o comunes (mesa, perro); concretos (libro, árbol) o abstractos (amor, libertad); individuales (flor, pájaro) o colectivos (ramo, bandada); contables (manzana, lápiz) o no contables (agua, arena). Esta clasificación es esencial para comprender cómo usar correctamente los sustantivos en diferentes contextos y construir oraciones más precisas y expresivas. Además, conocer estas categorías ayuda a los estudiantes a desarrollar un vocabulario más rico y a mejorar su capacidad de comunicación tanto en la escritura como en el habla.