Regulación Fisiológica: BPG y Efectos Bohr y Haldane
El 2,3-bifosfoglicerato 2,3−BPG es el regulador maestro de la hemoglobina. Se une específicamente al estado T en la cavidad central del tetrámero, estabilizándolo y reduciendo la afinidad por el oxígeno.
Esta regulación es genial para la supervivencia. En situaciones de hipoxia (altitud, tabaquismo), aumenta la concentración de 2,3-BPG, mejorando la liberación de oxígeno a los tejidos. Es una adaptación fisiológica perfecta.
La hemoglobina fetal tiene menor afinidad por el 2,3-BPG (porque la His143 está sustituida por Ser), por lo que tiene mayor afinidad por el oxígeno. Esto permite que el feto extraiga oxígeno de la sangre materna eficientemente.
Los efectos Bohr y Haldane completan el sistema regulatorio. En tejidos (pH bajo, CO₂ alto), la hemoglobina libera oxígeno (efecto Bohr). En pulmones (pH alto, CO₂ bajo), aumenta la afinidad por oxígeno para cargarse (efecto Haldane).
🫁 Fisiología práctica: El CO₂ estabiliza la desoxihemoglobina formando grupos carbamato y produciendo H⁺, optimizando el intercambio gaseoso.