Catabolismo de Lípidos: Procesos y Rutas Metabólicas
El catabolismo de lípidos representa uno de los procesos más eficientes para la obtención de energía en los organismos vivos. Los lípidos, especialmente las grasas o acilglicéridos, son moléculas que proporcionan 9 kcal por gramo, superando significativamente el aporte energético de los glúcidos. La respiración celular de estos compuestos sigue rutas metabólicas específicas que permiten su degradación completa.
Definición: El catabolismo es el conjunto de reacciones metabólicas mediante las cuales las células degradan moléculas complejas para obtener energía y componentes más simples.
El proceso de degradación de los acilglicéridos comienza con su descomposición en glicerol y ácidos grasos. El glicerol sigue una ruta particular transformándose en dihidroxiacetona-fosfato, que se incorpora a la glucólisis. A través de la respiración celular aerobia, una sola molécula de glicerol puede generar hasta 22 ATP, demostrando la eficiencia energética de este proceso.
Los ácidos grasos siguen un camino diferente mediante la β-oxidación, que ocurre en la matriz mitocondrial. Este proceso, también conocido como hélice de Lynen, representa un ejemplo fundamental del catabolismo celular. Los ácidos grasos primero se activan en el hialoplasma mediante su unión al CoA, consumiendo ATP. Una vez activados, atraviesan la membrana mitocondrial para iniciar su degradación sistemática.
Ejemplo: Durante la β-oxidación, cada ciclo de cuatro reacciones produce una molécula de acetil-CoA (excepto en el último ciclo que genera dos), además de NADH y FADH₂. El ácido graso se acorta progresivamente en dos carbonos por ciclo hasta su degradación completa.