¿Qué son los tejidos animales?
Imagínate que tu cuerpo es como una empresa súper organizada. Todo empezó con una sola célula (el cigoto), pero gracias a la diferenciación celular, esas células se especializaron para hacer trabajos diferentes. Así es como nacieron los distintos tipos de células que tienes ahora.
Un tejido es básicamente un grupo de células que se han puesto de acuerdo para hacer la misma tarea. Es como si fueran compañeros de equipo trabajando juntos. Cuando varios tejidos se unen, forman órganos (como tu corazón), y cuando varios órganos colaboran, crean sistemas completos (como tu sistema digestivo).
En tu cuerpo hay cuatro tipos principales de tejidos: epitelial, muscular, nervioso y conectivo. Cada uno tiene su propia "especialidad" y es fundamental para que funciones correctamente.
¡Dato curioso! Todas las células de tu cuerpo tienen el mismo ADN, pero cada una "lee" solo la parte que necesita para su trabajo específico.
Tejido epitelial: tu primera línea de defensa
El tejido epitelial es como el sistema de seguridad de tu cuerpo. Está formado por células súper unidas (sin espacios entre ellas) que cubren todas las superficies, tanto internas como externas. Básicamente, te protegen de todo lo que viene de fuera.
Hay dos tipos principales: el de revestimiento y el glandular. El de revestimiento incluye tu epidermis (la capa externa de la piel), las mucosas (que protegen tu tubo digestivo y vías respiratorias) y los endotelios (que recubren tus vasos sanguíneos).
El tejido glandular es el encargado de fabricar sustancias importantes. Las glándulas endocrinas liberan hormonas a la sangre, las exocrinas secretan cosas como el sudor, y las mixtas (como el páncreas) hacen ambas cosas.