Tipos de Células y Sus Estructuras Básicas
¿Sabías que no todas las células son iguales? Existen dos tipos principales que debes conocer perfectamente.
Las células procariotas son las más sencillas - imagínatelas como un apartamento de una sola habitación donde todo está mezclado. No tienen núcleo definido ni orgánulos con membranas, y su material genético (ADN) anda suelto por el citoplasma en una zona llamada nucleoide. Las bacterias son el ejemplo perfecto de este tipo.
Por otro lado, las células eucariotas son como una casa bien organizada con habitaciones específicas. Tienen un núcleo definido donde guardan su ADN y múltiples orgánulos especializados, cada uno con su función particular. Tanto las plantas como los animales (incluido tú) estamos formados por este tipo de células.
💡 Truco para recordar: "Pro" significa "antes" - las procariotas aparecieron antes en la evolución y son más simples.
La membrana plasmática es como la puerta de entrada de tu casa: controla qué entra y qué sale de la célula. Está hecha de una bicapa de fosfolípidos (con cabezas que "aman" el agua y colas que la "odian") y regula el paso de nutrientes y desechos.
Las células vegetales tienen algo extra: la pared celular. Es como una armadura rígida hecha principalmente de celulosa que les da forma y las protege de explotar cuando absorben demasiada agua.
El citoesqueleto funciona como los pilares de un edificio - una red de filamentos que mantiene la forma celular y ayuda a mover cosas dentro de la célula. En las células animales, el centrosoma (formado por dos centriolos) actúa como el "jefe de obra" organizando estos filamentos, especialmente durante la división celular.