La Cadena de Transporte Electrónico
La cadena respiratoria es el último acto de este espectáculo energético. Aquí es donde finalmente interviene el oxígeno y donde se fabrica la mayor cantidad de ATP.
Los NADH y FADH₂ ceden sus electrones a una cadena de proteínas en la membrana mitocondrial interna. Estos electrones van pasando de proteína en proteína como en una carrera de relevos, perdiendo energía en cada paso.
Esta energía perdida no se desperdicia: se usa para bombear H⁺ desde la matriz mitocondrial al espacio intermembrana. Se crea un gradiente electroquímico, como una presa que acumula agua para generar electricidad.
Finalmente, los H⁺ vuelven a la matriz a través de las ATP sintasas, y esta "cascada" de protones impulsa la síntesis de ATP. El oxígeno actúa como receptor final de electrones, formando agua.
💡 Balance final: Por cada glucosa, la respiración aeróbica produce 30 ATP: 5 de glucólisis, 5 de descarboxilación oxidativa y 20 del cicle de Krebs.