La base físico-química de la vida se encuentra en los átomos y moléculas. Los protones y neutrones conforman casi toda la masa de un átomo, mientras que la masa atómica es un número que indica cuánta materia contiene en comparación con otro átomo. Por su parte, la masa de los electrones se desprecia debido a que es muy pequeña, y la masa atómica se indica a la izquierda del símbolo químico.
El conocimiento de la química es esencial para comprender al organismo y cómo funcionan los isótopos de un mismo elemento. Estos tienen el mismo número de protones y electrones, variando únicamente el número de neutrones. Algunos isótopos son inestables y tienden a desintegrarse. Además, difieren en el número de neutrones, pudiendo decaer en un isótopo más estable y a un elemento diferente.
Bases químicas de la vida biológica
La fórmula estructural, que muestra los tipos y números de átomos, así como la disposición de los mismos en una molécula, es una expresión abreviada que describe la composición química de una sustancia. Por otro lado, las fórmulas químicas indican el número real de cada tipo de átomo presente y su proporción en la mínima forma de molécula.
Las interacciones de van der Waals se presentan en moléculas no polares que son eléctricamente neutras, pudiendo desarrollar de forma momentánea regiones de carga positiva y negativa débiles. Una región con un exceso temporal de electrones tendrá una carga ligeramente negativa, mientras que aquella de un déficit de electrones tendrá carga ligeramente positiva.
Compuestos orgánicos en la vida cotidiana
Los átomos de carbono se unen entre sí o con otros átomos para formar moléculas grandes con una amplia diversidad de formas. Además, las moléculas biológicas tienen características específicas que permiten su identificación. Los lípidos, por ejemplo, almacenan energía y constituyen el principal componente estructural de las membranas celulares.
Los hidrocarburos son moléculas no polares e hidrófobas cuyas propiedades se pueden alterar agregando grupos funcionales. Por su parte, las proteínas tienen varios niveles de estructura y se componen de subunidades de aminoácidos unidos entre sí por enlaces peptídicos. Además, los carbohidratos se componen de subunidades de azúcar y los ácidos nucleicos son moléculas de información compuestas de largas cadenas de subunidades de nucleótidos. El ATP y otros nucleótidos juegan un papel central en el metabolismo energético.
En resumen, la base química de la vida es fundamental para entender la biología y el funcionamiento de la célula. Los isótopos, las fórmulas estructurales y químicas, así como los compuestos orgánicos, son elementos esenciales para comprender la base molecular de la vida en el contexto de la biología.