La Vejez (60-65 años en adelante)
La vejez comienza oficialmente con la jubilación, aunque cada vez tenemos ancianos más activos y saludables. Con el envejecimiento de la población española, muchos de tus futuros pacientes serán personas mayores.
Físicamente experimentan una disminución de la eficacia funcional: menos masa muscular, problemas de sueño, dificultades motoras y pérdidas sensoriales (vista y oído principalmente). Son más propensos a enfermedades y su recuperación es más lenta.
Intelectualmente, pierden memoria a corto plazo y velocidad de procesamiento, pero mantienen intacta la memoria a largo plazo. Su inteligencia cristalizada (aplicar experiencias pasadas) compensa la pérdida de inteligencia fluida (resolver problemas nuevos).
Emocionalmente pueden mostrar labilidad emocional (lloran o se entristecen fácilmente) y cierta tendencia a comportamientos egocéntricos, como en la infancia. Algunos se vuelven más intolerantes, otros más sabios y tolerantes.
💡 Clave para el trato: Pueden aprender cosas nuevas, solo necesitan más tiempo y un ambiente estimulante sin presión.