Tipos de Inmunidad y Trastornos del Sistema
Tu cuerpo tiene dos estrategias de defensa principales. La inmunidad innata es tu seguridad básica desde que naces: piel, mucosas, inflamación y fagocitosis. Es rápida pero inespecífica, como un portero que no deja pasar a nadie sospechoso.
La inmunidad específica es tu equipo de élite que aprende y recuerda. Se divide en humoral (linfocitos B con anticuerpos) y celular (linfocitos T que atacan directamente). Esta tiene memoria, por eso no te da varicela dos veces.
Las citoquinas son como los WhatsApp entre células, coordinando toda la respuesta. Pueden actuar localmente o a distancia, y a veces varias tienen el mismo efecto por si una falla.
Cuando algo va mal, puedes tener enfermedades autoinmunes (tu sistema ataca células propias, como en diabetes tipo I), inmunodeficiencias (el sistema no funciona, como en VIH), o alergias (reacciones exageradas a cosas inofensivas).
La inmunización te protege de dos formas: activa con vacunas (tu cuerpo aprende a defenderse) o pasiva con sueros (te dan anticuerpos ya hechos, pero sin memoria).
¡Ojo! El shock anafiláctico puede ser mortal - es cuando tu sistema reacciona tan fuerte a un alérgeno que puede matarte. Por eso algunas personas llevan epinefrina de emergencia.