La higiene corporal de los niños
En la fase de colaboración, los niños participan cada vez más en su propia higiene, pero necesitan pautas claras. El educador debe asegurarse de que lleguen al centro en condiciones óptimas para evitar contagios.
El baño o ducha diaria sigue siendo esencial. Hacia los cuatro años pueden pasar a ducharse, pero siempre con supervisión inicial. Nunca dejes solo a un niño en la bañera, ni un segundo. Además del baño, deben lavarse cara y manos cada mañana.
El cuidado del cabello requiere lavarlo 2-3 veces por semana desde los dos años, frotando suavemente la raíz con las puntas de los dedos. Hay que secarlo bien y favorecer cortes que permitan peinarse solos. Ojo con los parásitos, uno de los mayores peligros.
El cepillado de dientes se inicia a los 18 meses, después de cada comida, siendo crucial el de antes de dormir. El cepillo debe ser pequeño, suave y cambiarse regularmente.
💡 Importante: Las uñas deben estar cortas y limpias porque son vehículo de gérmenes. Las de las manos se cortan redondeadas, las de los pies rectas.