La Música en la Edad Media (Siglos V-XV)
Durante estos mil años, la música medieval se dividía en dos grandes categorías que marcaron la cultura europea. Por un lado estaba la música religiosa, y por otro, la música profana que se desarrollaba en las cortes.
El canto gregoriano fue la revolución de la música religiosa. El Papa Gregorio I decidió unificar toda la música cristiana de Europa bajo un mismo estilo. Era música a capella (sin instrumentos), monódica (una sola melodía), cantada en latín solo por hombres y niños, con ritmo libre y de autores anónimos.
La música profana era todo lo contrario: colorida, animada y llena de vida. Los trovadores eran nobles que componían canciones sobre amor y aventuras, mientras que los juglares las interpretaban por las calles. Usaban instrumentos, cantaban en lenguas vernáculas, participaban hombres y mujeres, y tenía ritmo marcado.
Dato curioso: Alfonso X "el Sabio" recopiló música profana española en el libro "Cantigas de Santa María", y Guido d'Arezzo inventó el nombre de las notas musicales (ut, re, mi, fa...) que usamos hoy.