Límites y Continuidad
¿Sabes cuándo una función es continua en un punto? Es más fácil de lo que parece. Una función es continua en un punto cuando puedes dibujarla sin levantar el lápiz del papel.
Para que f(x) sea continua en el punto a, necesitas que se cumplan tres condiciones: que exista el límite por la izquierda, que exista por la derecha, y que ambos sean iguales al valor de la función en ese punto.
Cuando esto no ocurre, tienes diferentes tipos de discontinuidades. Si los límites laterales coinciden pero no con f(a), es una discontinuidad evitable (como un agujero en la gráfica). Si los límites laterales son diferentes, tienes un salto finito. Y si algún límite es infinito, es un salto infinito.
Las operaciones con límites siguen reglas específicas que debes memorizar. Por ejemplo, infinito más una constante sigue siendo infinito, pero cuidado con las indeterminaciones como ∞-∞ o ∞/∞.
Truco importante: Para resolver indeterminaciones del tipo ∞/∞, puedes usar la regla de L'Hôpital: deriva el numerador y el denominador por separado.