El desarrollo: el corazón del comentario
El desarrollo es donde realmente comentas el texto. Aquí debes partir siempre del texto para exponer su argumento, ideas y temas, pero interpretándolos en relación con la literatura de la época.
Durante el desarrollo, comentarás los recursos formales (verso, rimas, comparaciones, metáforas) relacionándolos siempre que sea posible con el contenido. No los analices por separado, sino como herramientas que el autor usa para transmitir su mensaje.
Si comparas varios textos, no los comentes por separado. Ve comparándolos simultáneamente: primero los temas que tratan todos, luego los tópicos literarios comunes, después las intenciones del autor, etc.
💡 Truco: Piensa en el desarrollo como una conversación entre el texto, su época y otros textos similares. Tú eres el moderador de esa conversación.