Pronombres átonos con flexión (me, te, se, nos, os, se)
¿Sabías que estos pequeños pronombres pueden cambiar completamente el significado de una oración? Dominar sus usos te dará mucha ventaja en el análisis sintáctico.
Los usos reflexivos son los más sencillos: la persona hace la acción sobre sí misma. Puedes comprobarlo añadiendo "a mí mismo", "a ti mismo", etc. Por ejemplo: "El niño se baña" (se baña a sí mismo).
Los usos recíprocos aparecen cuando varias personas se hacen algo entre ellas. El truco está en que puedes añadir "el uno al otro" o "entre sí": "Los generales se saludan" (se saludan entre ellos).
También encontrarás el se sustituto cuando aparece junto a lo, la, los, las. Es simplemente que "le" se convierte en "se" para evitar cacofonías: "Se la escribí" (en lugar de "le la escribí").
Truco clave: Si puedes eliminar el pronombre sin cambiar el significado básico, probablemente sea dativo aspectual o ético.