Estructura y Recursos de los Textos Científicos
La estructura de los textos científicos sigue patrones claros que te facilitan la comprensión. En los textos argumentativos encontrarás una introducción que contextualiza el tema, un desarrollo donde se presenta y demuestra la idea principal, y una conclusión que adopta una tesis definitiva.
Los textos expositivos son más directos: presentan el tema, desarrollan datos y teorías, y sintetizan la información al final. Muchas veces el último párrafo del desarrollo ya funciona como cierre.
Los recursos más útiles incluyen elementos gráficos (esquemas, gráficos, imágenes), aparato crítico (citas de otros autores que dan solidez al contenido) y bibliografía (fuentes consultadas). Las infografías también se consideran textos científicos porque presentan información de forma visual y comprensible.
Consejo práctico: Cuando leas textos científicos, fíjate primero en los elementos gráficos y la estructura para entender mejor el contenido.
Realismo y Naturalismo: Literatura de la Vida Real
El realismo del siglo XIX cambió completamente la forma de contar historias al mostrar la vida cotidiana tal como era realmente. Sus características principales incluyen narradores omniscientes, personajes de diferentes grupos sociales (no héroes idealizados) y un lenguaje sencillo y natural.
El naturalismo representa la evolución del realismo, pero va más allá. Busca explicar por qué las personas se comportan como lo hacen, analizando si es por factores biológicos o por el entorno social en el que viven.
Ambos movimientos comparten el objetivo de retratar la sociedad contemporánea de sus lectores, utilizando espacios reconocibles y un tiempo que avanza de manera lineal desde el inicio hasta el final de la historia.