El Naturalismo y sus grandes autores
El Naturalismo llevó el Realismo al extremo, aplicando métodos científicos a la literatura. Émile Zola, su creador francés, defendía que los humanos estamos determinados por nuestra herencia genética y ambiente social. Básicamente, no tenemos libertad real, algo bastante pesimista pero que permitía denunciar las injusticias sociales.
Los temas naturalistas son duros: miseria, alcoholismo, enfermedad y marginación. Los ambientes se vuelven lúgubres y sórdidos, llevando al extremo las descripciones realistas. En España, aunque Galdós y Clarín ya habían usado técnicas naturalistas, el movimiento comenzó oficialmente en 1883 con La cuestión palpitante de Emilia Pardo Bazán.
Emilia Pardo Bazán fue la intelectual más destacada de su época. Aristócrata gallega, escribió obras como Los pazos de Ulloa, donde enfrentaba el mundo feudal con las nuevas clases sociales. Vicente Blasco Ibáñez fue ideológicamente el más cercano al Naturalismo puro, retratando el duro mundo valenciano en La barraca y Cañas y barro.
En poesía y teatro estos movimientos tuvieron menos impacto. Destacan los posrrománticos Bécquer y Rosalía de Castro, que superaron el romanticismo con condensación y simbolismo. Galdós también renovó el teatro adaptando sus novelas y creando obras polémicas como Electra.
📚 Para recordar: El Realismo y Naturalismo dejaron una huella duradera especialmente en la novela, influyendo en la literatura hasta nuestros días.