Los Recursos Literarios: Tu Kit de Herramientas Creativas
Los recursos literarios se dividen en tres grandes grupos según cómo funcionan. Cada uno tiene su propio "superpoder" para hacer que un texto sea más interesante.
Los recursos fónicos juegan con los sonidos. La aliteración repite sonidos parecidos (como "el ruido con que rueda la ronca tempestad"), mientras que la onomatopeya imita sonidos reales con palabras (¡pum!, ¡miau!, ¡splash!).
Los recursos morfosintácticos manipulan la estructura de las frases. La anáfora repite palabras al inicio de versos, el asíndeton elimina conjunciones para acelerar el ritmo, y el polisíndeton las repite para ralentizarlo. El paralelismo usa estructuras iguales, mientras que el hipérbaton cambia el orden normal de las palabras.
¡Truco! Para recordar la diferencia entre asíndeton y polisíndeton, piensa: "asín" = sin conjunciones, "poli" = muchas conjunciones.
Los recursos semánticos crean significados especiales. La hipérbole exagera, la metáfora identifica dos cosas diferentes, el símil las compara directamente, la metonimia usa una parte por el todo, y la personificación da vida a objetos.