Las diferencias que los definen
Aunque nacieron al mismo tiempo, estos movimientos tomaron caminos muy diferentes. El Modernismo convirtió el lenguaje en su obsesión principal, buscando la belleza a toda costa con descripciones llenas de sensaciones y ambientaciones exóticas.
La Generación del 98, en cambio, usaba las palabras como herramientas para despertar conciencias. Su tema central era España: su dolor, su paisaje castellano y sus gentes humildes. Les preocupaba más el alma de las personas que la belleza del verso.
Mientras los modernistas escribían sobre países orientales y París, los del 98 se centraban en los problemas existenciales y en la intrahistoria de los pueblos españoles. Unos buscaban emocionar los sentidos, otros conmover las conciencias.
Recuerda: Modernismo = belleza y sensaciones; Generación del 98 = España y existencialismo.