Figuras estructurales y sonoras
El paralelismo va un paso más allá de la anáfora - aquí repites toda la estructura de la frase, no solo una palabra. Es como crear un patrón arquitectónico con las palabras que suena súper elegante.
La prosopopeya o personificación convierte objetos en personas que actúan y sienten. "El reloj nos grita la hora" le da vida y personalidad a algo inanimado, haciendo el texto mucho más dinámico.
Con la antítesis juegas con los opuestos para crear contraste. "Me esfuerzo por olvidarte y sin querer te recuerdo" muestra esa contradicción tan humana que todos reconocemos.
💡 Dato curioso: Las onomatopeyas no son iguales en todos los idiomas - mientras en español los gatos hacen "miau", en inglés hacen "meow".
La onomatopeya imita sonidos reales (crack, miau, splash), mientras que la aliteración repite sonidos para crear efectos musicales. "Mi mamá me mima" no imita ningún ruido real, pero suena genial al repetir la "m".