¿Qué es un verbo?
Un verbo es una palabra que expresa acciones (como "correr" o "saltar") y estados de ánimo (como "estar triste" o "sentirse feliz"). Lo genial de los verbos es que son palabras variables, lo que significa que cambian según la situación.
Los verbos tienen diferentes morfemas que nos dan información súper útil: número (singular o plural), tiempo (cuándo pasa), modo (cómo lo vemos), voz (quién hace qué) y persona (quién realiza la acción). Piensa en estos morfemas como las piezas de un puzzle que forman el verbo completo.
En castellano tenemos tres conjugaciones: verbos que terminan en -ar (como "cantar"), en -er (como "temer") y en -ir (como "partir"). Los verbos regulares siguen las reglas normales, mientras que los irregulares son los rebeldes que cambian de forma inesperada.
¡Dato curioso! Las formas no personales (infinitivo, gerundio y participio) no tienen persona y son súper útiles para formar tiempos compuestos como "he cantado" y perífrasis verbales como "voy a empezar".