Aplicaciones y Características de las Estructuras Artificiales
Las estructuras artificiales se encuentran presentes en prácticamente todos los aspectos de nuestra vida cotidiana. Desde los muebles que utilizamos hasta los grandes edificios que nos rodean, cada estructura está diseñada para soportar diferentes tipos de cargas y esfuerzos en las estructuras.
En el caso de las estructuras masivas, estas deben resistir principalmente esfuerzos de compresión debido a su propio peso y a las cargas que soportan. Por ejemplo, una presa hidroeléctrica debe soportar no solo su propio peso sino también la presión del agua que contiene. Los materiales utilizados en estas estructuras se seleccionan específicamente por su capacidad para resistir estos esfuerzos.
Las estructuras entramadas, por su parte, están diseñadas para manejar una combinación de tipos de esfuerzos, incluyendo tracción, compresión y flexión. Un puente de vigas, por ejemplo, experimenta diferentes tipos de esfuerzos según la carga del tráfico que soporta. La distribución eficiente de estas cargas es fundamental para la estabilidad y durabilidad de la estructura.
Definición: Los esfuerzos son las fuerzas internas que se generan en una estructura como respuesta a las cargas externas aplicadas.
Ejemplo: Una estantería es un ejemplo perfecto de estructura entramada donde los estantes horizontales vigas se apoyan en los soportes verticales pilares para distribuir el peso de los objetos almacenados.