El inicio del reinado: regencias y primeros conflictos
Isabel II heredó el trono con solo tres años, lo que significaba que necesitaba regentes que gobernaran en su nombre. Su madre, María Cristina, intentó mantener el absolutismo al principio, pero la guerra carlista la obligó a buscar el apoyo de los liberales.
Los liberales se dividían en dos grupos principales: moderados y progresistas. Aunque María Cristina prefería a los moderados, las presiones populares como el Motín de la Granja (1836) la forzaron a entregar el poder a los progresistas.
Los progresistas impulsaron reformas importantes como la desamortización de Mendizábal (1836) y la Constitución de 1837. Sin embargo, cuando Espartero asumió la regencia en 1840, gobernó de manera tan autoritaria que provocó una sublevación en 1843 liderada por el general moderado Narváez.
¡Ojo con esto! Los militares tuvieron un papel clave durante todo el reinado isabelino. Los pronunciamientos militares eran la forma habitual de cambiar de gobierno.