Pueblos Prerromanos y Colonizadores: Un Mosaico de Culturas
La Península Ibérica antes de Roma era como un puzzle de pueblos diferentes. Los tartessos controlaban el suroeste con su misterioso reino (hasta que desaparecieron en el s. V a.C.). Los íberos dominaban el sureste con sus pequeñas ciudades-estado, mientras que los celtas del interior vivían en tribus organizadas por familias.
Los pueblos colonizadores llegaron atraídos por nuestras riquezas mineras. Los fenicios fundaron Cádiz y trajeron el alfabeto; los griegos crearon colonias como Ampurias; y los cartagineses, más agresivos, establecieron Cartagena como base militar.
La romanización comenzó en 218 a.C. durante la Segunda Guerra Púnica y duró casi 200 años. Los romanos conquistaron la península en tres fases: primero el sur y este, luego el centro, y finalmente el norte tras las durísimas guerras cántabras.
Recuerda: Hispania dio a Roma emperadores como Trajano y Adriano, y filósofos como Séneca. ¡No éramos solo una colonia más!