Los Inicios del Catalanismo Político
Valentí Almirall fue el gran pionero del catalanismo político moderno. Decepcionado con el federalismo, en 1881 se separó del partido de Pi i Margall para crear algo específicamente catalán. Su idea era que el catalanismo fuera más allá de la cultura y se centrara en los "intereses materiales" del país.
Almirall organizó el Primer Congreso Catalanista (1880), que reunió a federalistas, republicanos y conservadores, creando posteriormente el Centre Català (1882). Su programa incluía la defensa de la lengua, los derechos civiles, la división comarcal y el proteccionismo económico.
En 1885, el Centre Català presentó al rey Alfonso XII el famoso Memorial de Greuges, un documento que denunciaba el centralismo y defendía el particularismo catalán. Fue clave para acercar el movimiento catalanista a la burguesía. Al año siguiente, Almirall publicó "Lo Catalanisme", estableciendo las bases del catalanismo progresista, popular, republicano y laico.
Sin embargo, las propuestas de Almirall resultaron demasiado extremadas y no consiguió crear la fuerza política interclasista que buscaba. Su oposición a la Exposición Universal de 1888 lo aisló definitivamente de la burguesía, y el Centre Català desapareció.
En 1887 nació la Lliga de Catalunya, más conservadora, con figuras como Àngel Guimerà y Lluís Domènech i Montaner. Esta nueva organización consiguió el apoyo burgués que Almirall no había logrado, defendiendo la oficialidad del catalán, el derecho civil catalán y el proteccionismo.
💡 Diferencia clave: Mientras Almirall buscaba un catalanismo popular y republicano, la Lliga optó por un enfoque más conservador y burgués.