B4: T1: Causas de la Guerra de Sucesión Española y composición de los bandos en conflicto
España ya no era la potencia de antes cuando llegamos al final del siglo XVII. Aunque seguía teniendo uno de los imperios coloniales más grandes del mundo, Francia y Austria habían tomado el liderazgo en Europa, mientras que Inglaterra y los Países Bajos preferían mantener el equilibrio entre las potencias.
El problema gordo llegó cuando Carlos II no podía tener hijos y había que decidir quién heredaría el trono español. Al principio, el candidato ideal era José Fernando de Baviera, pero murió antes que Carlos II. Esto dejó dos opciones principales: Felipe de Anjou (nieto del rey francés Luis XIV) y el Archiduque Carlos (hijo del emperador austriaco). Carlos II eligió en su testamento a Felipe de Anjou.
Cuando Felipe V llegó al trono en 1701, las otras potencias europeas se asustaron muchísimo. La idea de que Francia y España estuvieran unidas bajo la misma familia real les daba terror, así que formaron la Gran Alianza de la Haya para impedirlo. Inglaterra, Austria, Portugal y Saboya se aliaron contra Francia y la España de Felipe V.
¿Sabías que...? Esta guerra no solo enfrentó a países extranjeros, sino que dividió España: Castilla apoyaba a Felipe V mientras que Aragón, Valencia y Cataluña preferían al Archiduque Carlos porque respetaba mejor sus tradiciones y privilegios locales.
La guerra tuvo dos fases claras: primero ganaron los aliados (1704-1707), pero después Felipe V se recuperó. La batalla de Almansa en 1707 marcó el cambio, y Felipe V fue conquistando los territorios rebeldes y eliminando sus fueros con los Decretos de Nueva Planta. La guerra terminó con la Paz de Utrecht (1713) y los acuerdos de Rastatt (1714), donde España perdió muchos territorios pero Felipe V pudo quedarse como rey, creando un nuevo equilibrio europeo.