La Monarquía de Amadeo I y la Primera República (1871-1874)
Encontrar un nuevo rey no fue nada fácil. Finalmente eligieron a Amadeo de Saboya, pero su reinado fue un desastre desde el primer día. Imagínate llegar a España y que tu principal apoyo, el general Prim, sea asesinado justo cuando desembarcas.
Amadeo I se enfrentó a problemas imposibles de resolver: carlistas y republicanos lo odiaban, la aristocracia y la Iglesia le daban la espalda, y los progresistas estaban divididos entre constitucionalistas y radicales. Además, estallaron la Tercera Guerra Carlista y la guerra de Cuba. Cansado de tanta hostilidad, abdicó en febrero de 1873.
Tras el fracaso monárquico nació la Primera República (1873-1874), pero fue aún más caótica. En menos de un año pasaron cuatro presidentes: Figueras, Pi y Margall, Salmerón y Castelar. Los republicanos estaban divididos entre federales y centralistas, mientras el país se desangraba con revueltas campesinas, huelgas obreras y el Cantonalismo (ciudades que se declaraban independientes).
¡Momento clave! El cantón de Cartagena resistió hasta enero de 1874, pero finalmente el general Pavía entró en el Congreso y disolvió la República, preparando el regreso de los Borbones con Alfonso XII.