Principios del liberalismo político
El liberalismo político de la Restauración se basaba en principios fundamentales que debes dominar. La soberanía nacional significaba que el poder ya no venía del rey por derecho divino, sino de la nación, aunque en la práctica estaba muy limitada.
El sufragio era el mecanismo para elegir representantes, pero durante la Restauración funcionaba mediante corrupción electoral sistemática. La división de poderes separaba el legislativo (Cortes), ejecutivo (Gobierno) y judicial (Tribunales), al menos en teoría.
La iguualtat jurídica acababa con los privilegios estamentales del Antiguo Régimen, convirtiendo a los súbditos en ciudadanos iguales ante la ley. Sin embargo, las libertades individuales como la de expresión y opinión tenían importantes limitaciones en la práctica.
Diferencia clave: A diferencia del Antiguo Régimen con su sociedad estamental, el liberalismo estableció una sociedad de clases basada en la riqueza, no en el nacimiento.