Revolución y Crisis: La Guerra de la Independencia (1788-1833)
Carlos IV heredó una España en crisis económica y social. Su valido Godoy tomó decisiones desastrosas, como aliarse con Napoleón en el Tratado de Fontainebleau (1807), que permitió la entrada de tropas francesas.
El Motín de Aranjuez (1808) derrocó a Carlos IV, pero Napoleón aprovechó el caos. Tras las Abdicaciones de Bayona, puso a su hermano José Bonaparte como rey, desencadenando la Guerra de la Independencia (1808-1814).
Mientras España luchaba contra los franceses, las Cortes de Cádiz redactaron la Constitución de 1812. Esta "Pepa" establecía la soberanía nacional, división de poderes y derechos individuales. Era revolucionaria para su época.
Fernando VII regresó en 1814 y anuló todo lo progresista. Su reinado alternó entre absolutismo y el Trienio Liberal (1820-1823), cuando los militares le obligaron a jurar la Constitución. Su muerte en 1833 desató las Guerras Carlistas por la sucesión.
Recuerda: La Constitución de 1812 influyó en movimientos liberales de toda Europa y América.