Las fuentes históricas son elementos fundamentales para comprender y analizar el pasado de manera objetiva y documentada.
Durante La crisis del Antiguo Régimen (1788-1833), España experimentó una transformación fundamental que marcó el paso del absolutismo al liberalismo. Este período se caracterizó por profundos cambios políticos, económicos y sociales que sentaron las bases del Estado moderno. Las fuentes históricas resueltas de esta época nos permiten entender mejor el conflicto entre los defensores del antiguo sistema y los partidarios de las nuevas ideas liberales.
Las fuentes históricas secundarias y las fuentes históricas no escritas son especialmente relevantes para el estudio de este período. Los documentos oficiales, correspondencia privada, prensa de la época, obras de arte y arquitectura nos ayudan a reconstruir el complejo panorama de transformación social. Para los estudiantes de 2º de Bachillerato, el análisis de estas fuentes resulta fundamental en la preparación de la EVAU, especialmente en lo referente a los bloques 7, 8 y 10. Los comentarios de fuentes históricas deben abordar aspectos como el contexto histórico, la naturaleza de la fuente, su contenido específico y su relevancia histórica. Es importante destacar que durante este período se produjeron acontecimientos cruciales como la Guerra de la Independencia, las Cortes de Cádiz, el reinado de Fernando VII y los primeros pronunciamientos liberales, todos ellos ampliamente documentados a través de diversas fuentes que permiten un análisis profundo y detallado de la época.
La metodología para el análisis de fuentes históricas para niños debe adaptarse a su nivel de comprensión, utilizando recursos visuales y explicaciones sencillas que les permitan entender la importancia de las evidencias históricas en la construcción del conocimiento sobre el pasado. Los ejemplos de fuentes históricas deben seleccionarse cuidadosamente para facilitar su comprensión y despertar su interés por la historia.